1995 seria un gran año para la industria de los videojuegos pues el E3 serviría como ventana para mostrarnos grandes productos que de una u otra manera se quedaron en nuestras casas y en la memoria colectiva.
Como parte de la evolución hacía los 32 bits, Sony haría su incursión definitiva en el mundo de los videojuegos con la presentación de una ambiciosa Playstation (PSX) después de su fallida colaboración con Nintendo quien a su vez presentaba allí la Ultra 64 que finalmente termino por convertirse en Nintendo 64 y más tarde vendría SEGA con la tardía pero muy querida Dreamcast. Gráficos en 3D con muchos efectos cautivo a los asistentes a cada uno de los shows.
Allí vimos nacer franquicias como Tomb Raider, Resident Evil, Crash Bandicoot y Half-Life. También muchos fans se regocijaron con nuevas ediciones de Final Fantasy, Metal Gear, Legend Of Zelda y otros que ya gozan de ostentar el título de «Clásicos».
Me faltaría espacio para mencionar todos los momentos buenos, malos y cringe que nos regaló el E3 en tiempos de presencialidad. Sin embargo, el evento ya había tenido una especie de declive puesto que las redes sociales y las plataformas de video empezaron a ser usadas por las grandes empresas para hacer sus propias presentaciones sin las prisas de un deadline para la fecha de un E3. Ejemplo de ello es que tanto Nintendo como Microsoft ya promocionaban nuevos titulos y nuevas tecnologías desde sus redes, pero sin dejar de lado su presencia en el E3 para anuncios «gordos». Sin embargo en 2019 tuvo una estocada inesperada que, aunque muchos intenten negarlo, hizo que la gran feria de los videojuegos cayera en el valle de la amargura. Sony canceló su presencia en el E3 2019 y se montaría exclusivamente en el carro del formato digital bautizando sus propias presentaciones como STATE OF PLAY, anunciando allí prácticamente todas sus novedades tanto de software como de hardware.
Y como una mala broma de la vida, llega Marzo de 2020 y con ello, pandemia. Se anuncian cancelaciones de eventos presenciales por doquier y, como es lógico, el mundo viró hacia lo digital. El E3 no fue ajeno a ello e hizo su mejor intento convocando a las compañías a unificaran todos sus formatos digitales entorno a un E3 digital pues sus organizadores tenían la certeza de que el evento no había muerto del todo y que la nueva era digital podría darle una nuevo aire. No obstante algunas presentaciones como las de Electrónica Arts, PC Gaming, Capcom, Sony y Microsoft (solo por mencionar algunas) se sintieron vacías, incompletas y llenas de momentos cringe. La gente en redes manifestaba que el gran evento de los videojuegos había muerto.
En 2021 se empiezan a anunciar Directos, Videos Pregrabados y más formatos por parte de las grandes compañías para que la gente se entere de las novedades haciendo que la presencia en eventos deje de ser necesaria pues llegan a su público de manera inmediata y justo como ellos quieren y no como en evento lo determine; aparte del ahorro en costos que esto conlleva.
Estamos en 2022 y los organizadores del E3 han anunciado la cancelación del evento. No han explicado las razones, pero en realidad no hace falta pues, en mi opinión, este artículo describe de alguna manera el por qué de esa decisión y también para darnos una luz de lo que el E3 ha Sido y no volverá a ser.
Nos llevamos muchos recuerdos, anécdotas, emociones y una que otra facepalm de lo que han sido casi 27 años de un E3 que sin duda pasará a la historia como uno de los mejores eventos de videojuegos de todos los tiempos.